Herniaria glabra L.
Planta herbácea anual, a veces vivaz, con tallo ramificado y rastrero, que forma un tapiz. Sus pequeñas hojas ovaladas son sésiles. En su axila brotan racimos de florecillas blancas. El fruto es una cápsula que contiene semillas marrón oscuro (ver figura, abajo a la derecha).
La especie, originaria de Europa y Asia, crece en sustratos pobres, arenosos, y al borde de los caminos y de los arroyos. Antiguamente, se utilizaba la herniaria para tratar las vías urinarias y las hernias, de ahí procede su nombre genérico de herniaria.
Se recolectan sus sumidades (hierba herniarize). Se limpian cuidadosamente los tallos y se ponen a secar en capas finas a la sombra, con una buena ventilación y a una temperatura que no sobrepase los 35° C. Se conservan en seco y a oscuras. Contienen una saponina triterpenoide que se descompone en ácido quillaico y azúcares simples.
Los tallos de una especie próxima, la herniaria vellosa (H. hirsuta), contienen saponinas, que se dividen en ácido galactónico, glucosa y otros azúcares. Ambas especies poseen los mismos glucósidos: rutina, cumarina y perniarina. Son altamente diuréticas, asépticas y ligeramente espasmolíticas. Resultan unas plantas medicinales muy activas en los tratamientos de las inflamaciones de las vías urinarias, de los riñones y de la vesícula biliar. Se emplean también de forma preventiva contra la formación de cálculos renales y de sedimentos urinarios.
Época de floración: V-VIII
Cosecha: sumidades VI-VIII