Laburnum anagyroides MEDIC.
El citiso es un árbol o arbolito de ramas de color gris verdoso, dotado de hojas trifoliadas con largos pecíolos, vellosas y tomentosas en su cara inferior. Sus flores amarillas forman largos racimos colgantes. El fruto es una vaina que encierra semillas marrones. Toda la planta es tóxica.
Es una especie de origen mediterráneo que crece de forma espontánea en los collados soleados y en las rocas, sobre todo encima de un soporte calizo. Se planta en los parques y jardines por sus cualidades ornamentales. Sin embargo, su fuerte toxicidad, especialmente en las semillas, hace desaconsejable su plantación en las proximidades de las escuelas y campos de juego.
Para la medicina se recolectan sus semillas (semen laburni). Cuando las vainas están completamente maduras, son marrones y aterciopeladas. Se recogen a mano, se ponen a secar y se extraen las semillas. Estas, ricas en mucílago, poseen un sabor amargo y contienen un alcaloide, la citisina, además de albúminas, taninos, glucósidos y colina.
Las semillas son empleadas en raras ocasiones y siempre con prudencia, bajo control médico. Actúan como calmante del sistema nervioso central, y son útiles en caso de irritabilidad excesiva, jaqueca, dolores de cabeza y estados depresivos. También actúan favorablemente sobre determinadas afecciones hepáticas, y constituyen un contraveneno para las graves intoxicaciones por arsénico.
La medicina recurre generalmente a productos extraídos del citiso que contienen citisina aislada para hacer subir la tensión, por ejemplo. La medicina popular utiliza las hojas para preparar tisanas sedantes.
Época de floración: V-VI
Cosecha: semillas IX-X