Papaver rhoeas
Familia: Papaveraceae
Planta herbácea anual de tallo erguido y ramificado, con hojas pinnadas y alternas. En sus axilas se forman largos pedúnculos que al principio soportan un capullo orientado hacia el suelo, el cual da posteriormente origen a una gran flor de color rojo vivo. Los pétalos son cuatro y tienen en su base una mancha negra. El fruto es una cápsula redonda. Toda la planta es vellosa y rica en vasos laticíferos.
Se encuentra en los terraplenes, en los terrenos de echadizo, como adventicia en jardines y en cultivos en pleno campo. Sus flores se conocían en el pasado por su acción sobre las enfermedades pulmonares y se empleaban como soporífero para los niños.
Se recolectan sus pétalos rojos (flos papaveris rhoeas) inmediatamente antes de abrirse completamente. Se recogen a mano, con buen tiempo y alrededor del mediodía. Se ponen a secar en capas finas, a la sombra, aireándolas de vez en cuando. En secadero, la temperatura no debe superar los 35°C. Una vez secos, se conservan los pétalos en la oscuridad y en recipientes cerrados. Contienen restos de alcaloides tales como la roeadina, así como antociano rojo.
La medicina popular los emplea como sedantes, contra la ronquera y la tos irritante. En esos casos, se toma una infusión que se prepara con dos cucharaditas de pétalos por una taza de agua. Los pétalos no son tóxicos y las otras partes de la planta tan solo lo son débilmente. Las restantes adormideras silvestres (P. argemone, P. dubium y P. hybridum) carecen de materias activas, por lo que no son recolectadas.
Época de floración: V-IX
Cosecha: flores V-VIII.