Populus nigra L.
Árbol de hermoso porte con ramas que, inicialmente oscuras, más tarde se vuelven de un color gris verdoso. Su corteza es arrugada y de color gris oscuro. Las hojas son pecioladas y cordiformes, con una forma cuneiforme en la base; en las axilas de las hojas se encuentran yemas viscosas. El álamo es una especie dioica, es decir, tiene flores masculinas y femeninas que se agrupan en amentos, los cuales se abren pronto en primavera, antes de que broten las hojas en las ramas. Sus frutos son cápsulas vellosas. Esta especie se planta en zonas húmedas, a lo largo de ríos, cunetas y carreteras.
La medicina utiliza las yemas (gemmae populi), que se recolectan en primavera cuando aún están cerradas y rodeadas de escamas viscosas. Es preferible realizar la recolección en árboles caídos o abatidos. Las yemas deben secarse rápidamente, preferentemente en un secadero, y luego conservarse en recipientes cerrados. Contienen aceites esenciales, taninos, glucósidos como la salicina y populina, resina y otras sustancias. Son altamente desinfectantes y diuréticas; su eficacia contra los catarros de las vías respiratorias superiores también es reconocida. Además, reducen el contenido de urea en la sangre y alivian los dolores articulares de origen reumático. Se emplean en infusiones, utilizando 1 a 2 cucharaditas de brotes machacados por cada 1/4 de litro de agua, para tomar en dos veces. Un ungüento hecho con brotes frescos o secos, o también con la corteza fresca o seca de las ramitas jóvenes, es eficaz contra las dermatitis, las hemorroides, y los dolores de la gota y el reumatismo.
El álamo blanco (P. alba), el álamo balsámico (P. balsamifera), y el temblón (P. tremula) también son utilizados con fines terapéuticos.
Época de floración: IV
Cosecha: yemas y corteza III-IV