Prunus cerasus L. (sin.: Cerasus vulgaris MILL.)
Árbol o arbusto de ramas de color pardo rojizo, a menudo colgantes, con hojas alternas, brillantes y dentadas. Sus flores blancas, de simetría pentámera, brotan en manojos sobre ramas acortadas. Los frutos son drupas de color rojo oscuro. Se trata de una especie de origen asiático que se cultiva en todo el mundo por sus frutos, en forma de numerosas variedades.
Con fines medicinales, se recolectan los pedúnculos maduros, que se desecan en condiciones favorables. Estos pedúnculos contienen principalmente taninos y se incorporan a las infusiones destinadas a tratar la bronquitis y la diarrea. Son diuréticos y forman parte de la composición de tisanas adelgazantes. Las hojas del cerezo producen los mismos efectos, además de ser carminativas y antianémicas. También se utilizan para conservar los pepinillos.
Las cerezas se consumen frescas o en conserva. Su jugo fresco es rico en hierro y calcio, por lo que se emplea en el tratamiento de trastornos digestivos o hepáticos y de la anemia. Las cerezas maduras también se utilizan para la preparación de un jarabe, que es útil para mejorar el sabor de ciertos remedios, haciéndolos más asimilables.
La madera de cerezo es dura y bien coloreada, y se emplea con frecuencia en la industria del grabado y en la ebanistería. Además, el cerezo es una fuente importante de polen y néctar para las abejas.
Época de floración: V
Cosecha: pedúnculos y frutos VII-VIII